19 May Diferentes tipos de cafeteras. Descúbrelas en Zumy
Parece que mentira que haya tantas maneras diferentes de preparar una única bebida. Alrededor del mundo nos gusta beber el café de muchas formas distintas, y por ello hay diferentes tipos de cafeteras, cada una con unas características diferenciadas. Por eso, hoy vamos a adentrarnos en el apasionante y fascinante mundo de la tecnología de las cafeteras.
Tipos de cafeteras
Cafetera italiana o Moka
Se trata de una cafetera muy popular en Italia, España y otros países mediterráneos. Está compuesta por dos cuerpos con forma de tronco de pirámide octogonal. En el cuerpo inferior se vierte el agua y se coloca un pequeño cacillo con forma de embudo, donde se pone el café molido. Al calentar la cafetera, y por ende el agua, ésta asciende a la parte superior, infusionando el café por el camino.
El éxito de estas cafeteras radica en su simplicidad y pequeño tamaño. Además de que son realmente económicas y producen un café bastante bueno si lo preparamos correctamente (la cantidad de café y su prensado en el cacillo condicionan su sabor).
Cafetera americana o de goteo
Esta es una cafetera fácil de reconocer porque, aunque en nuestro país no es muy habitual, sí lo es en Estados Unidos. Esto nos lleva a haberlo visto en centenares de series y películas y a tener una imagen reconocible de ella.
Su tecnología es más sencilla si cabe que la de la cafetera italiana. El agua situada en el depósito se calienta y se hace pasar por un filtro (normalmente de papel) donde está situado el café. Al tratarse de un filtro bastante denso, el agua pasa lentamente, gota a gota (de ahí su otro nombre) depositándose en la mencionada jarra una vez infusionado el café.
Las cafeteras americanas tienen sus ventajas: no hay que estar pendientes de ellas e incluso las podemos dejar listas por la noche y programarlas para que nos preparen el café justo cuando nos suene el despertador. Así nos levantaremos con olor a café por la mañana.
Cafetera francesa o de émbolo
La cafetera francesa es una de las cafeteras más sencillas de todas y, además, una de las más valoradas ya que ofrece un café con un buen sabor y gran cuerpo. Aunque, como contrapartida, tiene un proceso de preparación un poco más complicado.
El mecanismo de la cafetera es extremadamente simple. Un recipiente cilindríco, normalmente de vidrio, y un émbolo con un filtro. En un cazo calentamos agua y la vertemos en el cilindro, donde habremos colocado el café molido. Tapamos la cafetera, pero sin bajar el émbolo, y dejamos infusionar 4 o 5 minutos. Transcurrido ese tiempo, bajamos el émbolo, llevando el café molido al fondo y dejándonos un rico café para beber.
Cafetera espresso
El problema está en que calentar agua y llevarla a tanta presión no es algo tan fácil de conseguir. Es por eso que las cafeteras espresso domésticas todavía son medianamente aparatosas y requieren un mayor mantenimiento.
Su precio es ligeramente superior al resto de tipos de cafeteras, y varía sobre todo en función de la cantidad de presión que son capaces de conseguir o de si pueden moler café en grano.
Cafetera espresso monodosis
En los últimos años han proliferado las cafeteras espresso monodosis, con Nespresso a la cabeza. Tienen como ventaja que son muy fáciles de usar (pones la cápsula, le das a un botón y ya tienes tu café listo) y como inconveniente que el café que preparan sale mucho más caro, ya que las cápsulas no son baratas.
Su funcionamiento es similar a las espresso convencionales solo que consiguen la presión suficiente para elaborar el café dentro de la cápsula y, al tener esta un volumen más pequeño, todo se simplifica, permitiendo que estas cafeteras sean mucho más pequeñas y tengan un mantenimiento mínimo.
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